Del total de elementos analizados, se determinó que una de esas manchas corresponde a sangre humana. Ahora se realizará una nueva prueba de ADN para corroborar si los restos hemáticos son de la joven desaparecida desde el 2 de junio pasado.
Según el documento oficial, la sangre fue encontrada en la parte trasera de la camioneta: «Ante el resultado positivo (+) en la detección de sangre humana en la MUESTRA N° 2A (consistente en un (1) hisopo con muestra recolectada del sector trasero de pick up Toyota Hilux», dice el escrito.
El pasado jueves 13 de julio se realizaron peritajes en la camioneta Toyota de César Sena y el auto Citroën C4 de Gustavo Obregón, de los cuales se obtuvo 22 muestras reactivas al luminol. Hoy el resultado del laboratorio de esos elementos confirma que en el vehículo de César Sena había manchas de sangre humana. Por su parte en el auto de Gustavo Obregón no se hallaron restos de ese tipo.
Esta es la segunda confirmación de hallazgos de sangre humana hallada en el expediente por el femicidio de Cecilia. Lo que complica cada vez más a la familia Sena. En las últimas semanas de junio, recibieron un dato alarmante. Luego del crimen, la familia había obsequiado varios muebles a una mujer del barrio Emerenciano, imputado también en el expediente. La Policía llegó al lugar y la dueña de casa contó que, efectivamente, los regalos le habían llegado de manera inesperada. Eran un colchón, una cama y un par de mesitas de luz.
Sobre esos muebles, se realizaron pruebas de luminol para determinar si existía alguna manche de sangre. Las encontraron.
Días después, se reveló un dato escalofriante: que esas manchas de sangre encontradas pertenecían a Cecilia. Lo confirmaron los estudios de laboratorio que se realizaron con ADN de la madre de la víctima y su hermana.
Cabe destacar que, fue el mismo Gustavo Obregón, la «mano derecha» de Emerenciano Sena, quien, en su declaración testimonial, contó que el cuerpo de Cecilia Strzyzowski, salió de la casa de la familia Sena, en la camioneta Toyota de César.
En ese testimonio Obregón contó «fui y vine como tiro. Estaba nervioso y no sabía qué hacer. La camioneta de él (César), ya estaba metida en el garaje de cola. Ahí César me dice: ‘Gusti, ayudame a sacar esto, tenemos que ir al campo’», relató Obregón y agregó que César Sena «ya tenía el bulto en el suelo, atrás de la camioneta, extendido a lo ancho». Según detalló, que se negó a ayudarlo a subir «el bulto» porque estaba «muy asustado y nervioso». Diario TAG