Desde el Instituto de Medicina Forense de Córdoba emitieron un informe respecto al estudio de los huesos que se encontraron en el rastrillaje realizado en el Rio Tragadero y Campo Rossi en el marco de la investigación que se lleva a cabo por el femicidio de Cecilia Strzyzowski. El informe expresó que «debido a la investigación, se asume que los huesos corresponderían a una misma persona».
Los restos óseos hallados en los rastrillajes por el caso que investiga lo sucedido con Cecilia Stryzowski y que habían sido enviados a Córdoba para su correspondiente estudio, según el Instituto de Medicina Forense de allí, se encuentran «completamente esqueletizados, no hay rastros de tejido blando y la gran mayoría de ellos están completamente calcinados».
Además, ninguno de los huesos se encuentra completo, el informe sostiene que «están todos fragmentados en pequeños trozos, producto de la exposición al fuego a altas temperaturas».
«La fragmentación fue producto mayormente de la exposición del cadáver a la acción del fuego, a su enfriamiento y a su posterior traslado al lugar del hallazgo», dice el documento y agrega: «La combustión del cadáver debe haber sido entre 12 a 14 horas, si se esperó que se consumieran las brasas o entre 6-7 horas mínimo, mientras el fuego estaba activo».
Además, aclararon que los restos que se encontraron corresponderían a una misma persona debido a la «similitud» en tamaño, forma y estado de conservación de los huesos calcinados. Sin embargo, sostuvieron que «no se logró apreciar ningún tipo de fractura que pudiera estar asociada a alguna acción previa al efecto del fuego».
Respecto a la calcinación que presentan los restos, el informe manifiesta que pudieron quebrarse debido al «enfriamiento y al estar tan frágiles por la manipulación de haber sido trasladados del lugar de quema, al lugar del hallazgo en el río».
«El elemento que se usó para mantener el fuego fue abundante leña y quizás algún tipo de combustible líquido (gasoil, kerosene, nafta)«, expresa el informe y agrega: «Si los huesos estaban en color gris-azul, fueron expuestos a una temperatura entre 500 a 700°. Si eran de color blanco, estuvieron expuestos a una temperatura mayor a 800°».
Respecto a la pira que se pudo haber llevado a cabo para lograr la calcinación subrayaron que «las dimensiones habituales de la superficie de una pira están en torno a los 2,5m x 1,5m. La duración típica del consumo de carga de combustible de es unas 6-7 horas, lo que permite 6 o 7 horas adicionales durante las cuales se deja que el cadáver sea consumido por las brasas».
Además, sostuvieron: «Para esta hipótesis, la cantidad y tipo de leña utilizada rondó los 700 a 900 kilos». Finalmente, los antropólogos adjuntaron una imagen de un esqueleto humano con la superposición de las fotos correspondientes a los huesos humanos identificados. Diario TAG
