por Charly Cardoso – En declaraciones recientes, Capitanich aseguró que “Macri y sus funcionarios indujeron al gobernador Peppo a tomar deuda en dólares” y se desentendió de la deuda de u$s250 millones que entró en default en 2020. Llamativo silencio de la oposición, salvo el cruce mediático del Gobernador y el senador Zimmermann por el endeudamiento provincial donde se tocó tangencialmente el tema.
Recientemente el primer mandatario salió al cruce del senador por el Chaco, Víctor Zimmermann, que en un comunicado cuestionó el manejo de la deuda provincial durante la gestión del Frente de Todos. En esa oportunidad Capitanich fijó su posición sobre la deuda de u$s250 millones contraídos para hacer frente a “un juicio por parte de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial, por un procedimiento de liquidación que no corresponde a nuestra función”.
Capitanich cargó contra la gestión del ex presidente Macri, cuyos funcionarios “indujeron al gobernador Peppo a tomar deuda en dólares”, dijo. “Yo no me hago cargo de u$s250 millones de deuda tomada en la gestión del gobernador Peppo”, prosiguió el mandatario e inmediatamente trató de despegar a Peppo, asegurando que “él tampoco es responsable porque esto fue una deuda de 23 años originada por un juicio por parte de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial, por un procedimiento de liquidación que no corresponde a nuestra función”.
Desconociendo su responsabilidad institucional como administrador del Estado provincial u obnubilado por la falta de una oposición organizada con quien interactuar, Capitanich confesó que “Macri y sus funcionarios indujeron al gobernador Peppo a tomar deuda en dólares, precisamente porque ellos querían aumentar el endeudamiento en dólares para fortalecer las reservas del Banco Central y hacer las operaciones típicas de ‘carry trade’ que fue el saqueo que hicieron en el país”.
La sola idea que un Gobernador elegido libremente por el pueblo de su provincia pudiera ser “inducido” por funcionario nacionales a comprometer las arcas provinciales, pone en duda la capacidad de dicho mandatario para administrar eficientemente los recursos de los chaqueños; además de abrir un enorme interrogante en torno a la legalidad del manejo de la deuda pública o “el saqueo” como dijo Capitanich.
Más allá de los alcances de cualquier análisis sobre los dichos del mandatario; en los hechos, llama la atención el silencio de la representación parlamentaria de la oposición; ya que una de las funciones que la Constitución le fija a la Legislatura chaqueña es “autorizar al Poder Ejecutivo a contraer empréstitos”. Habrá que esperar que finalicen sus largas vacaciones.