El Juez de la Cámara Primera en lo Criminal N 1 de Sáenz Peña Rodolfo Gustavo Lineras, rechazó de manera contundente las visitas íntimas a presos condenados por «Femicidio», consideró que las mujeres podrían correr peligro de vida en una situación de esa naturaleza, fundamentó el camarista.
En contacto con NORTE, Lineras hizo saber además de manera formal a los otros miembros del tribunal que integra, su rotunda oposición a que el femicida Daniel Tevez (condenado recientemente) goce de «visitas íntimas» en el Complejo Provincial Penitenciario II. El detenido en la actualidad, sentenciado en septiembre de este año a la pena de prisión perpetua como autor culpable del caso conocido como el «doble crimen de Quitilipi», en el que resultaron asesinadas dos jóvenes mujeres, Magalí Romero (22) y Fátima Florencio (18).
Inédito hecho en la ciudad
El enlace matrimonial del doble femicida, generó una encendida polémica en la opinión pública. Lo cierto es que, a raíz de este último evento, Lineras que dictó la máxima condena en contra el femicida, planteó ante sus pares su disconformidad. Hasta tanto no se implemente un protocolo específico que sea adecuado para afrontar como corresponde este tipo de casos, y evitar de esta manera que se pueda dar una situación de gravedad para con la visita (esposa).
Mujeres en peligro
Consultado al respecto el camarista Lineras, visibilizó su preocupación expresando «La situación debe ser analizada no tanto desde la posición del detenido sino principalmente desde la perspectiva de la mujer visitante, cuya integridad psicofísica, e incluso su vida, corre peligro cierto y objetivo durante este tipo de visitas privadas, a solas con un femicida». Agregando que se debe confeccionar un protocolo de actuación que sea útil para prevenir hechos desgraciados que después vamos a lamentar».
Asimismo, dijo que debe ser consensuado entre todos los actores involucrados, Jueces, Fiscales, autoridades del Ministerio de Seguridad, penitenciarias, de la Secretaría de Género y Derechos Humanos, del Comité contra la Tortura, así como entidades intermedias comprometidas con la materia.
Protocolo para femicidas
El protocolo en cuestión sería aplicable exclusivamente a privados de la libertad acusados del delito de femicidio, o de cualquier grave atentado delictivo cometido contra la integridad psicofísica de una mujer, tenga o no condena firme.
Dijo que, como mínimo debería exigirse una junta médico psiquiátrica y/o psicológica. Pero, además la mujer que pretende acceder a la «visita íntima» tendría que recibir previamente el asesoramiento de un organismo interdisciplinario especializado en violencia de género.
Por supuesto que el detenido ni la mujer visitante podrían ser obligados a someterse a este procedimiento, pero en tal hipótesis parece evidente que no calificarían como aspirantes de esta clase de visitas. A ello cabría sumar la aprobación del consejo correccional o disciplinario del establecimiento, seguida de la expresa autorización del órgano judicial competente, con intervención del Ministerio Público Fiscal y de la Defensa, garantizado con amplitud el derecho a recurrir de las partes interesadas en el supuesto de denegación del permiso».