Sindicatos docentes de la provincia y Gobierno tuvieron este mediodía de viernes una segunda reunión para discutir la pauta salarial de 2022.
La convocatoria pasó a cuarto intermedio para la semana próxima, pero desde el Frente Gremial Docente y la Coordinadora Docente ya calificaron la propuesta oficial como «insuficiente». Gobierno, en tanto, asegura que garantizarán que los salarios le ganen a la inflación.
Los representantes gubernamentales, Pérez Pons (ministro de Planificación, Economía e Infraestructura) y Aldo Lineras (ministro de Educación) buscan llegar a un mutuo acuerdo con los sindicatos antes del inicio del ciclo lectivo el 2 de marzo para así complementar el pedido de Nación y cumplir con los 190 días de clases.
Los sindicatos docentes buscan, como herramienta «absolutamente irrenunciable e innegociable», la inclusión de la cláusula gatillo en todas las ofertas salariales que Gobierno haga. También exigen que los salarios de 2022 superen a la inflación estimada anual.
Durante la segunda Comisión de Política Salarial y Condiciones de Trabajo del sector realizada hoy, Gobierno realizó su propuesta, que incluye un «piso de discusión salarial del 40%».
Hay versiones cruzadas respecto a, justamente, la cláusula gatillo. El Frente Gremial Docente que incluye a los sindicatos de ATECH, SADOP, CTERA y UTRE, afirmó que el ofrecimiento de Gobierno «excluye» la cláusula. La Coordinadora Docente, integrada por AMET, ACHABI, FIUD y UDA, exigió que se la incluya pero en carácter «bimestral».
Desde Gobierno afirman que fue incluida, pero que se trata de una revisión semestral que se disparará si la inflación supera el aumento salarial del 40%. Esta cláusula condicional de Gobierno incluiría dos revisiones: una en junio y otra en diciembre de 2022. El motivo de las mismas sería «cotejar la dinámica de la inflación y salarios y reajustar el valor del punto para igualarlos», según explicaron en la reunión.
Fuera de la cláusula gatillo, el ofrecimiento inicial de Pérez Pons para el aumento salarial de los docentes fue el siguiente y se divide en cinco partes: en marzo un 10%, en julio 8%, en octubre otro 8% y en enero 2023 un 9%.
De esta manera, Gobierno explicó que el detalle del valor del punto en marzo -en caso de que esta oferta fuese aprobada- llegará a $10,4327; en julio $11,2673; octubre $12,1687 y en enero 2023 $13,2638.
Puesto en otras palabras, un docente que recién inicia con su trabajo en Resistencia y que en enero cobró $45.083, «percibirá en marzo $49.030, en julio pasará a $52.503, en octubre llegará a $56.254 y en enero de 2023 a $60.812».
Distinto sería el caso de un docente con 10 años de antigüedad que trabaja en Resistencia, cuyo salario en enero fue de $52.764. «En marzo sería de $57.499, en julio pasaría a $61.665, en octubre $66.166 y en enero $71.633», detallaron desde Casa de Gobierno.
Una vez que las cartas fueron puestas sobre la mesa, los sindicatos y el Gobierno acordaron aplazar la reunión y pasar a un cuarto intermedio, que será la semana próxima pero aún con fecha a definir.
La postura de los sindicatos indica que la oferta fue rechazada, pero los representantes gubernamentales aún se mantienen a la expectativa con esperanzas y afirmaron que trabajan en un aumento para las asignaciones familiares, descuentos en útiles e indumentarias para docentes, padres y madres «en formación docente» y en un «incentivo por el cumplimiento de los 190 días de clases».